PATATAS FRITAS MUY SABROSAS Y CRUJIENTES
Las patatas fritas muy sabrosas y crujientes son el acompañamiento perfecto para una gran variedad de platos. Ya sea con carnes, pescados, hamburguesas o incluso solas, su sabor irresistible y textura dorada conquistan a todos. Sin embargo, no siempre es fácil lograr ese punto exacto que tienen en los mejores restaurantes.
Por eso, aprender a prepararlas correctamente en casa marca una gran diferencia. Con unos sencillos trucos y pasos específicos, es posible conseguir unas patatas fritas muy sabrosas y crujientes, con el exterior dorado y el interior tierno, como recién salidas de una cocina profesional.
Además, hacerlas en casa permite elegir la variedad de patata ideal, controlar el tipo de aceite y añadir condimentos al gusto. Desde un toque de ajo en polvo hasta hierbas aromáticas o especias, hay muchas formas de potenciar su sabor sin complicaciones.
Por otro lado, esta receta no solo es fácil, sino también rápida y económica. Ideal para sorprender a tus invitados o para darte un capricho cualquier día de la semana, sin tener que salir de casa ni gastar de más.
En definitiva, dominar la técnica para hacer patatas fritas muy sabrosas y crujientes te permitirá elevar cualquier comida y disfrutar del auténtico sabor casero que tanto gusta. Te contamos cómo conseguirlo paso a paso.
INGREDIENTES DE LA RECETA
- 1 K de patatas
- 2 cucharadas de maicena, fécula de maíz cucharada de pimentón dulce
- Perejil
- Sal
- Aceite para freír
PREPARACIÓN DE LAS PATATAS FRITAS MÁS SABROSAS Y CRUJIENTES
Quitamos la piel de las patatas, lavamos bien y cortamos con la forma deseada.
Ponemos nuestras patatas ya cortadas en un bol y añadimos la fécula de maíz.
Removemos, mezclando, hasta que la maicena se integre bien y de manera lo más homogénea posible, en todas nuestras patatas.
Agregamos el pimentón y hacemos lo mismo, mezclamos hasta que se integren.
Por último, incluimos el perejil bien picado a nuestra mezcla y movemos hasta integrar.
Ponemos abundante aceite a lamentar.
Iremos friendo nuestras patatas por tandas, sin poner demasiadas de una sola vez.
Así nos quedarán más sueltas y crujientes.
Cuando estén, las ponemos sobre papel de cocina, para que suelten el exceso de aceite.
Iremos friendo el resto de patatas, hasta tenerlas todas.
Ponemos sal al gusto.
Ya podremos disfrutar de un delicioso plato de patatas fritas, como las de restaurantes, muy sabrosas y crujientes.
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